miércoles, 27 de enero de 2016

2 de Timoteo, 1:8

2 de Timoteo, 1:8 - Por tanto no te avergüences de dar testimonio del Señor nuestro, ni de mí, que estoy preso por él; antes sé participante de los trabajos del Evangelio por el poder de Dios.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario